Liderazgo personal: Cómo transformarte en tu propia líder
Habitualmente tendemos a creer que liderar es la capacidad de inspirar, transformar o generar influencia positiva en otros. Pero nadie lidera a otros sin un fuerte liderazgo personal. Hoy te cuento cómo liderarte para conducirte y crecer en tu carrera profesional.
Pasos para afianzar el liderazgo personal
1Definir tu visión
¿Cuál es tu propósito en la vida, cuál es tu sentido, qué es aquello en lo cual querés dejar una huella? ¿Dónde se juntan tu profesión con tu pasión? ¿Dónde se entrelaza aquello por lo cual te pagan con lo que amas? ¿Tu vocación con tu formación? ¿Dónde estás hoy y donde querés llegar? Aquí tenes que definir un deseo y hacer una declaración:
YO QUIERO SER ______ y QUIERO HACER ______
¿Qué te hace distinta? ¿Única?
Y en esto es importante destacar que vas a requerir de iniciativa, flexibilidad, pasión y perseverancia para lograrlo. No se trata de hacer lo posible. Se trata de hacerlo posible. Para ser una buena líder tenés que conducirte en una dirección: Definila. ¿Cuál es tu propósito, tu visión? ¿Quién querés ser?

El liderazgo personal es algo que se construye de manera consciente. ¿Empezaste a construir el tuyo?
2Ser protagonista
Ser protagonista es dejar de esperar y simplemente empezar a HACER que las cosas pasen, a comprometerte con tu decisión día a día. Creer en vos es clave. Y creer en vos es una cuestión de elección y de responsabilidad para dar lo mejor. ¿Qué querés elegir hoy? Vos podes ver escasez o abundancia. Y tu forma de mirar depende de vos. Si miras desde la abundancia, podes aprovechar cada situación como una oportunidad para aprender y hacerte cargo. La actitud es lo que hace la diferencia. Para ser una buena líder es imprescindible accionar con voluntad y compromiso.
Seguramente transformarte en quien querés ser es desafiante porque vas a tener que atravesar obstáculos, resolver situaciones y generar habilidades que te acerquen a tu objetivo.
Para desarrollar tu liderazgo personal necesitas un plan de acción que te permita anticipar y diagnosticar tus necesidades, y gestionar tus propios cambios. ¿Cuál puede ser tu plan de acción? ¿Y para qué lo necesitas?
3Administrar tu tiempo
Ningún plan de acción sería tal si no tenemos en cuenta el tiempo que necesitamos para llevarlo adelante. Aquí es clave la claridad con la que puedas enfocarte y cumplir tus plazos. Lo primero que puedo sugerirte es ¡que pienses en grande! Que tengas una visión lo suficientemente poderosa para que te motive a mantenerte siempre en tarea, y fiel para lograrla. Pero que pienses en grande, no quiere decir que tengas que hacer todo ya, o todo de golpe, o todo en un año. Te propongo que puedas distinguir entre lo que es urgente, y no urgente y lo que es importante y no importante. Y que siempre dispongas de tiempo en tu agenda para que tu plan se pueda cumplir. Tu presente tiene que tener un sentido orientado a tu futuro. Celebra cada logro y ve por el siguiente. Administrar el tiempo es vital en el desarrollo de tu liderazgo personal.

Las emociones nos guían y nos alertan de aspectos que requieren atención. Es importante reconocerlas para auto liderarte.
4Gestionar tus emociones
Todos los pasos son importantes y este tiene la particularidad de que poder gestionar nuestras propias emociones nos da libertad y seguridad. Las personas tomamos decisiones y resolvemos según las emociones que tenemos. Entonces es importante no tomar decisiones permanentes respondiendo a emociones que suelen ser temporales y estar conectadas a algún hecho que las dispara. Son como faros que nos avisan acerca de algo que sucede y que no reconoceríamos sin esa señal. El miedo, el enojo, la exigencia, la vergüenza, el pánico nos “cuidan” porque nos alertan de algo a lo que debemos prestarle atención. ¿Cuáles son tus emociones? ¿Cómo las expresas? ¿Cuánto tiempo te das para hacerlo? Las emociones vienen y se van. Pero si te quedas en alguna entonces puede instalarse un estado de ánimo que sea perjudicial para tu propia visión. Es necesario ser positiva, ser compasiva y al mismo tiempo ser fuerte y asertiva. Si no te percibís así, podes indagarte. ¿Qué te falta? ¿Qué necesitas? Y en esa pausa que te das puedes crearte buenos hábitos emocionales. El humor es uno de ellos. Una líder conectada con su mundo emocional es siempre más efectiva.
Más sobre autonomía laboral aquí.
5Cuidar y crear tus relaciones
Para ejercer un buen liderazgo personal tenés que cuidar tus vínculos como tesoros. Somos seres sociales y no podríamos lograr nada solas. ¿Cómo son tus relaciones en el trabajo? ¿Cómo te llevas con tus colegas? ¿Qué otras relaciones requiere tu crecimiento profesional? De la calidad de nuestras relaciones depende la calidad de nuestros resultados. ¿Cómo te podés relacionar para generar contextos adecuados para tu propio desarrollo laboral? Una buena líder sabe elegir como, cuando y qué comunicar en cada ocasión. Y en cuanto a comunicar se trata, es imprescindible chequear si lo que se ve de vos es lo que vos querés mostrar. De lo contrario habrá que gestionar los ajustes que requiere tu forma de comunicarte.

La primera que debe comprometerse con tu propio liderazgo personal eres tú.
6Desarrollar la confianza
Entre quien sos hoy y quien querés ser, hay un salto de confianza. ¿Cuánto confías en vos? Te sugiero: Ser coherente entre lo que decís y lo que hacés; sentirte capaz con las habilidades y competencias correctas; ser confiable y cumplir con tus propias promesas; y dar lo mejor de vos. Las preguntas que te pueden ayudar son: ¿Cuánto cumplís tus propias promesas? ¿Cuánto pones de vos para mejorar? La confianza en vos misma es requisito para las grandes conquistas personales. Liderarte requiere que te tengas cada vez más confianza.
Entérate cómo integrar el networking profesional a tu vida.
El liderazgo personal en marcha
Todo depende de cuán buena observadora seas de vos misma y de lo que te rodea. De estar abierta al aprendizaje, de mantener el foco en tus objetivos, de poner límites firmes, de animarte a nuevas formas de vivir y organizar tu día. Ante todo de conectarte con lo que te importa verdaderamente, de soñar en grande y crear acciones para lograrlo.
¿Qué nuevas preguntas te surgieron ahora? ¿Que necesitas aprender? ¿Qué necesitás para transformarte en la líder de tu propia vida? Planificar, ejecutar, evaluar, ajustar, y no darte por vencida. Vos sos mucho más que cualquier obstáculo que aparezca, vos podes crear un mundo mejor para vos misma.
Te dejo estas preguntas para que vayas despertando tu propio liderazgo para crear una visión estratégica de vos misma y descubrir tu forma de salir al mundo:
¿Qué líder querés ser de vos misma?
¿Para qué te sirve ser tu propia líder?
¿Qué valor tiene para tu vida que puedas liderarte?
Siempre podes marcar una diferencia. Un antes y un después. Es cuestión de decidirte y ponerte en marcha. Escuchate, conocete y transformate para liderarte en la búsqueda de tu propio crecimiento y solidez profesional.
Excelente artículo, Gladys Benaim.
Felicitaciones y gracias por tantos conceptos orientadores!
Un abrazo desde Argentina